En mi búsqueda por la red de recetas de otros países, encontré este postre en la página «Mar va a cocinar», según ella comenta lo copió de una página asiática y es un postre de la cocina china ó birmana (no se sabe exactamente su origen).
Sólo con leer sus ingredientes ya me apeteció hacerlo y me puse manos a la obra, os lo muestro:
Ingredientes:
600 c.c. de leche de coco
150 gramos de sémola de trigo (yo he usado de la marca NOMEN)
170 gramos de azúcar
75 gramos de mantequilla
3 huevos
2-3 cucharadas de semillas de sésamo
1/4 de cuchara (té) de cardamomo molido
1 pizca de sal
En una cacerola mezclamos la leche, la sémola y el azúcar y ponemos esta mezcla al fuego, calor medio, removiendo sin parar para que no se pegue, hasta que hierva.
Añadimos la mantequilla y continuamos removiendo hasta que la masa se despegue de las paredes.
Separamos la mezcla del fuego y dejamos enfriar.
Entretanto batimos las claras a punto de nieve.
Incorporamos a la mezcla templada, primero las yemas, el cardamomo y la sal y después las claras, removiendo con cuidado.
Preparamos un molde (28×18) engrasándolo con mantequilla.
Vertemos en él la mezcla, espolvoreamos con el sésamo y lo llevamos al horno, precalentado a 160 grados, durante unos 45 minutos.
Sube mucho y después baja, no os preocupéis.
Dejar enfriar, desmoldar y servir cortado en rombos.