La idea de este pastel la encontré en el blog «Tximitxurri», es un constraste de sabores y texturas muy suave y agradable y se puede tomar tanto templado como frío.
Yo he modificado un poco la manera de hacerlo porque he salteado todos los ingredientes antes de mezclarlos para potenciar los sabores y ha sido un acierto.
Ingredientes:
1 morcilla de Burgos (yo, de Ríos)
1 manzana
Hojas de berza gallega (podéis sustituírla por hojas de acelgas ó espinacas)
4 huevos
200 c.c. de nata de cocinar
2 cucharadas de tomate frito
Aceite de oliva virgen extra Graccurris
Sal
Pimienta negra molida
Mantequilla
Pan rallado
Instrucciones:
Hervimos las hojas de berzas, escurrimos muy bien y troceamos menuditas, reservamos.
Pelamos y cortamos a daditos la manzana y la morcilla a rodajas gruesas, reservamos.
Ponemos 1 cucharada de aceite en una sartén y salteamos los daditos de manzana hasta que tomen un poco de colorcito, retiramos y ponemos en un bol.
Hacemos la misma operación con la berza reservada.
A continuación las rodajas de morcilla por ambas caras hasta que veamos que la piel empieza a desprenderse, se las quitamos y desmenuzamos en el bol.
Le añadimos los huevos bien batidos mezclados con la nata, salpimentamos.
Precalentamos el horno a 170 grados con un poco de agua en la bandeja para cocer el pastel al baño María.
Enmantequillamos un molde y le espolvoreamos pan rallado, le damos golpecitos bocabajo para eliminar el sobrante.
Vertemos la mezcla.
Horneamos durante unos 45 minutos ó hasta que pinchando con una brocheta esta salga limpia.
Servimos templado ó frío con un poco de tomate frito por encima.
Se me ha roto un poco al desmoldarlo porque hay moldes que no son tan buenos como parecen…
Que delicia Flori, la verdd es que tiene una pinta riquísima
Besitos
Muchas gracias Carolina, besos