Os dejo una receta de pan muy fácil de hacer, sólo hay que tener un poco de paciencia por los levados pero, viendo los panes que nos suelen vender que, cada vez, son de peor calidad, merece la pena perder un rato y tener pan que sabemos qué ingredientes lleva.
Ingredientes:
450 grs. de harina de fuerza (ésta que yo he usado tenía 12 grs. de proteínas)
1 sobrecito de levadura de panadería
1 cucharadita de sal
325 c.c. de agua templada (embotellada)
Instrucciones:
Mezclamos harina y sal.
La ponemos en un bol y hacemos un hueco en el centro.
Le vertemos el agua templada y esparcimos la levadura. Ojo! El agua sólo debe estar tibia, de lo contrario mataría el efecto de la levadura.
Podemos usar panificadora para amasar, yo lo he hecho a mano.
Vamos mezclando partiendo desde el centro, esta operación podemos hacerla con cuchara de madera.
Cuando esté toda la masa integrada, la colocamos sobre una superficie enharinada ligeramente.
Vamos amasando hasta conseguir una masa lisa, suave y que no se pegue a las manos. No debe quedar una masa dura.
Si necesitamos un pelín más de harina se la ponemos pero sin pasarnos.
Formamos una bola que pondremos en un bol amplio.
La introducimos en un sitio sin corriente hasta que doble su volumen (yo uso el interior del microondas apagado, claro!) Esto suele tardar una hora:
Sacamos la masa sobre una superficie enharinada (para que no se pegue), la desgasificamos y dividimos en dos partes.
Ponemos la bandeja de horno forrada de papel ó lámina de silicona.
Extendemos cada parte de masa con el rodillo y hacemos un rectángulo.
Envolvemos sobre sí mismo como si se tratase de un brazo gitano, presionamos un poco y le damos bonita forma.
Colocamos sobre la bandeja de horno dejando debajo el pliegue de unión de la masa.
Hacemos lo mismo con la otra porción:
Dejamos levar de nuevo:
Precalentamos el horno a 250 grados, con un recipiente de agua dentro para que se forme vapor.
Cuando haya levado la masa le damos unos cortes con un cútex, cuchillo ó tijeras de cocina bien afilados.
Pulverizamos con agua y espolvoreamos con un poco de harina.
Bajamos el horno a 200 grados é introducimos el pan.
Dejamos hornear durante unos 20-25 minutos (depende del horno).
Comprobamos que está cocido dándole un golpe con la palma de la mano, nos ayudamos de unos guantes de cocina para no quemarnos, y debe sonar hueco:
Dejamos enfriar sobre rejilla.
Como salen 2 barras muy grandes, yo las he hecho rebanadas y congelado para ir usando poco a poco.
Animaros que es muy agradable hacer pan y poco a poco le iréis pillando el punto.
Os dejo este video tan, tan interesante de Richard Bertinet sobre el amasado a mano: